Educación y energía solar van de la mano en las áreas rurales de México

Con su iniciativa social, Atlas Renewable Energy ofrece acceso a internet a los niños en las áreas rurales de México.

México enfrenta uno de los retos más desafiantes de su historia: mejorar la educación y la alfabetización en el campo. En los últimos cincuenta años, en México la matrícula escolar ha aumentado de 3 millones de estudiantes a 36,4 millones, de acuerdo con el World Education News + Reviews (WENR). Sin embargo, la desigualdad social y educativa entre las zonas rurales y las ciudades ha aumentado visiblemente.

La situación del estado de Hidalgo es un ejemplo de esta desigualdad. Este estado, ubicado a poca distancia de la capital de la nación, enfrenta difíciles problemas. Según el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), Hidalgo tiene la octava tasa de pobreza más alta de México, con un 52,8%. Hidalgo también se enfrenta a varios desafíos en términos de educación: casi el 9% de sus residentes no saben leer ni escribir, lo que pone al estado en el puesto 26 en materia de alfabetización en el país.

En los primeros meses de 2019 nuestro equipo de Atlas Renewable Energy comenzó a trabajar con la comunidad aledaña a la Planta Solar Guajiro, en el área occidental del estado. Durante la planeación del proyecto social, además de identificar las necesidades inmediatas de la comunidad, entendimos que ella requería dos iniciativas adicionales: tener acceso a fuentes de energía renovables y mejorar sus condiciones sociales.

Guajiro, la primera planta de energía solar de México, llevará energía limpia a más de 120.000 familias y eliminará casi 215.000 toneladas de dióxido de carbono de la atmósfera cada año. Los beneficios medioambientales son claros. Sin embargo, cuando profundizamos en los problemas locales más apremiantes, nos encontramos con retos inesperados. Muchas escuelas, por ejemplo, carecían de materiales didácticos, baños y agua corriente.

Entender las necesidades de la comunidad

En Atlas Renewable Energy nos preocupamos por servir a la comunidad. Antes de planificar el proyecto de intervención social, estudiamos cuidadosamente las necesidades de la población. Nuestro enfoque humanista de la responsabilidad social nos exige establecer objetivos ambiciosos pero realistas. En el caso de la comunidad aledaña a la Planta Guajiro, nos aseguramos de que teníamos la capacidad de llevar a cabo iniciativas para mejorar su calidad de vida y apoyar el desarrollo local.

Las primeras preocupaciones tenían que ver con las malas condiciones de la infraestructura escolar. En este sentido, reunimos a un equipo que pintó y reparó las aulas de clase. También construimos zonas techadas para el recreo de los niños, para que puedan divertirse al aire libre sin que los afecten las condiciones climáticas, y evaluamos qué equipos y muebles eran necesarios para crear aulas digitales.

El proyecto se inició y sigue en marcha con el mismo objetivo: beneficiar a los estudiantes de las comunidades aledañas a la Planta Solar Guajiro. El objetivo es que puedan tener acceso a internet y a una nueva plataforma educativa digital que los estudiantes y maestros pueden utilizar durante las clases. Esta plataforma educativa se revisa y se adapta constantemente de acuerdo con las necesidades e intereses de cada escuela. Además, en cada aula se evalúa exhaustivamente el progreso académico de los estudiantes. La plataforma permite a los estudiantes usar internet satelital, tabletas, equipos de realidad virtual y programas educativos interactivos. El resultado es una experiencia de aprendizaje mejorada que impulsa la creatividad, curiosidad y habilidades de pensamiento crítico de los estudiantes.

Usar la tecnología para liderar el camino

La alianza entre Atlas Renewable Energy y The Pale Blue Dot fue clave para desarrollar este proyecto. The Pale Blue Dot es una organización que promueve el desarrollo social para niños y jóvenes en México, mediante una educación que emplea tecnología e internet. Con el equipo experto de The Pale Blue Dot, formado por antropólogos, sociólogos y técnicos especializados en estudiar las necesidades e intereses de la comunidad, pudimos formular el proyecto que satisface las necesidades reales de la comunidad. El papel de The Pale Blue Dot en la ejecución del proyecto ha sido clave: evalúa las escuelas, adapta el programa a los estudiantes y capacita a los maestros para operar los dispositivos de la plataforma educativa.

Nuestro concepto de aulas digitales se basa en los beneficios que la tecnología aporta a la educación de niños y jóvenes. Al crear una solución digital, contribuimos a cerrar la brecha entre las escuelas rurales y las urbanas, que generalmente cuentan con más recursos. Además de mejorar los resultados académicos, las aulas digitales son divertidas e interactivas; en ellas se usan herramientas dinámicas para inculcar en los estudiantes el amor por el aprendizaje.

Ofrecer aprendizajes significativos para todos

Este proyecto es el resultado de nuestro esfuerzo para retribuir a la comunidad; lo más importante es que cautivó las mentes y los corazones de todos los participantes. Los resultados reflejan el compromiso y la atención invertidos desde su planeación hasta su implementación.

Además de Guajiro, nuestras iniciativas benefician a los estudiantes de todos los niveles —desde primaria hasta secundaria— del municipio de Nopala de Villagrán. También proporcionamos estos recursos a casi 800 adultos que asisten a la Biblioteca Pública de Dañu. Estamos muy orgullosos de contribuir con estas comunidades trabajadoras, con la provisión de acceso a nuevos recursos educativos para más de 2.400 niños y adultos. Son muchos los estudiantes que se benefician de los programas creados específicamente para satisfacer sus necesidades. Esto nos motiva a continuar invirtiendo y apoyando a las comunidades, mientras nos esforzamos por tener un impacto positivo en América Latina, para el presente y sus próximas generaciones.

Fuentes